La técnica consiste en instalar nidos de unos insectos depredadores (Aphidus Colemani) en el tronco de estos árboles para acabar con el problema que genera la resina que desprenden. La ciudad cuenta con unos 2.000 ejemplares de esta especie repartidos por su entramado urbano, a las que se les aplicará este procedimiento durante las próximas tres semanas

07/05/2020 – El Ayuntamiento de Fuengirola ha comenzado a aplicar un tratamiento biológico para combatir el pulgón de las jacarandas, según ha anunciado esta mañana el concejal de Ecología Urbana, Antonio Carrasco, quien ha explicado que la técnica que se está empleando consiste en instalar nidos

de unos insectos depredadores, denominados Aphidus Colemani, en el tronco de los árboles para acabar con el problema de la resina que generan estos ejemplares cuando padecen la plaga del pulgón.

“Hemos iniciado un tratamiento contra el pulgón en las jacarandas que durará tres semanas para evitar las molestias que genera la resina de estos árboles”, ha explicado Carrasco, señalando que “por estas fechas las jacarandas son atacadas por un mosquito y desarrollan la enfermedad del pulgón y para combatirla, desde la concejalía de Ecología Urbana hemos iniciado un tratamiento que consiste en poner en los troncos de las jacarandas unos nidos y ahí meter unos insectos depredadores llamados Aphidus Colemani”.

Así, tal y como ha continuado detallando el edil, “estos insectos pican al mosquito, ponen un huevo y así se crea una larva, que se va comiendo el pulgón y acaba con el problema”.

En total, según ha explicado Carrasco, “se van a soltar 61.000 insectos divididos en tres semanas. La primera semana, en concreto, los días 6 y 7 de mayo soltaremos 26.000 insectos; la segunda semana, los días 13 y 14 de mayo, soltaremos 15.000 insectos; y la tercera semana, los días 20 y 21, soltaremos 20.000 insectos y así trataremos las 2.000 jacarandas que tenemos en Fuengirola”.

Las jacarandas (con flores de color lila) son árboles muy utilizados en la ciudad porque embellecen las zonas en las que se encuentran, aunque tienen como contrapartida las molestias que genera su resina cuando son atacados por alguna plaga. Con tratamientos biológicos como el que se ha empezado a aplicar en Fuengirola se actúa de forma anticipada para controlar la plaga del pulgón, que es la causante de la resina para impedir así las molestias que genera entre los vecinos.